ESCRIBE TU PROPIO GUIÓN
Al crecer, a todos se nos da un guión. Rara vez nos damos cuenta, pero es parte de la educación de nuestros padres y nuestra “familia” de la iglesia. Los guiones nos brindan seguridad y sentido de dirección. En su mayoría, los guiones de vida son algo bueno y nos mantienen a salvo; son necesarios.